El profesor llega a clase y pregunta
a cada alumno que tal se encuentra ese día, la mayoría responde
"Bien", pero uno dice que está preocupado por una enfermedad de su
madre y se siente nervioso e inquieto.
Es importante conseguir que los
alumnos hablen de sus emociones, eso libera
la tensión acumulada y les ayuda a
relajarse.
Para conseguir la máxima atención en
el aula es necesario conseguir un ambiente relajado y que los alumnos estén en
calma, así pueden concentrar su energía en las explicaciones del profesor.
Para lograr que los alumnos expresen
sus emociones en el aula se tiene que crear una atmosfera de buena comunicación
con el profesor.
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